¿Qué es la meteorología?

¿Qué es la meteorología?

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¿Qué es la Meteorología?

La palabra meteorología proviene del griego meteoros (alto en el cielo) y logos (conocimiento, tratado) y se traduce como el tratado de los fenómenos atmosféricos.

La meteorología es la rama de la física que aborda los fenómenos que ocurren en la atmósfera. Estos se refieren a una gran variedad de procesos, incluyendo entre otros aspectos el movimiento de la atmósfera (meteorología dinámica), su interacción con los flujos de energía radiativa (radiación solar e infrarroja), los procesos termodinámicos que llevan a la formación de las nubes y la generación de la precipitación en cualquiera de sus formas (lluvia, nieve y granizo), los intercambios de energía con la superficie (transportes de calor y vapor de agua), las reacciones químicas (formación de la capa de ozono, generación de contaminantes por reacciones fotoquímicas), los fenómenos eléctricos (rayos) y los efectos ópticos (arco iris, espejismos, halos en el Sol y la Luna).

Historia de la Meteorología

El interés por el tiempo atmosférico se remonta a los comienzos de la humanidad y los intentos por comprenderlo y predecirlo a los primeros tiempos de los que tenemos testimonios escritos.

Si bien ya en el año 230 AC., Aristóteles conocía la presencia de vapor de agua en el aire, no es hasta el siglo XVII que se comienza a estudiar la atmósfera en su conjunto.

Los primeros instrumentos para medir las variables meteorológicas como el termómetro (Galileo 1607), el barómetro (Torricelli, 1643) y el anemómetro (Hooke, 1667), así como el auge de la navegación permitieron incluir la experimentación objetiva en el estudio de la atmósfera.

El primero en definir de modo correcto la circulación atmosférica global fue George Hadley, con un estudio sobre los vientos alisios efectuado en 1735. En los inicios, ésta fue una comprensión parcial de cómo la rotación terrestre influye en la cinemática de los flujos de aire.

Más tarde (en el siglo XIX), fue comprendida la plena extensión de la interacción a larga escala tras la fuerza del gradiente de presión y la deflexión causada por el efecto de Coriolis, que en forma conjunta dan origen al complejo movimiento tridimensional del viento.

En 1856, William Ferrel hipotetizó la existencia de una «célula de circulación» en latitudes medias, en las cuales el aire se deflecta por la fuerza de Coriolis creando los principales vientos de los oestes.

La observación sinóptica del tiempo atmosférico era aún compleja por la dificultad de clasificar ciertas características climáticas como las nubes y los vientos. Este problema fue resuelto cuando Luke Howard y Francis Beaufort introdujeron un sistema de clasificación de las nubes (1802) y de la fuerza del viento (1806), respectivamente.

El verdadero punto de cambio fue la invención del telégrafo en 1844, lo cual permitió comenzar a intercambiar información sobre el tiempo meteorológico a velocidades inigualables.

La invención del primer telégrafo eléctrico

En septiembre de 1873 se reunió en Viena el primer Congreso Meteorológico Internacional, que dio origen al primer organismo de coordinación a escala mundial: la Organización Meteorológica Internacional.

En 1904, el noruego Vilhelm Bjerknes propuso enfocar la predicción del tiempo partiendo de la observación tridimensional de la atmósfera, lo que constituye el fundamento de la predicción actual. Las dos principales dificultades para llevarlo a cabo era la dificultad del problema matemático y la escasez e inadecuación de las observaciones meteorológicas de la época (los datos que se disponían no eran suficientes y además se restringían a la superficie de la tierra).

A principios del siglo XX apenas había comenzado a desarrollarse la observación de la atmósfera superior mediante globos sonda y cometas que portaban un meteorógrafo para registrar las observaciones. El seguimiento de los globos con teodolito desde tierra permitía deducir la dirección y velocidad del viento.

Primer mapa meteorológico

En los años veinte, los meteorólogos de la llamada escuela noruega conducido por Vilhelm Bjerknes desarrollaron con detalle la teoría de la evolución de las depresiones de latitudes medias y sus masas de aire y frentes asociados.

En los años 1950, los experimentos de cálculo numérico con computador mostraron ser factibles. Los ordenadores empezaron a realizar rápidamente los cuantiosísimos cálculos necesarios y dieron su nombre a las técnicas de predicción numérica utilizada de forma general en nuestros días.

Tras la Segunda Guerra Mundial hubo un consenso unánime para reestructurar la cooperación meteorológica internacional y se aprobó la creación de un nuevo organismo con carácter intergubernamental, La Organización Meteorológica Mundial, cuyo convenio entró en vigor en 1950.

Actualmente la predicción operativa del tiempo se basa en modelos numéricos de simulación de la atmósfera muy sofisticados, ejecutados por potentes ordenadores a partir de la observación de los datos atmosféricos provenientes de muchas fuentes, sobre todo de satélites. El uso práctico y público de la información sobre la predicción del tiempo y del clima se ha multiplicado y rinde grandes beneficios a la sociedad.

Meteorología y Climatología

Lo primero que debemos aclarar son los conceptos de tiempo y clima, que hacen referencia a escalas temporales diferentes.

Las condiciones actuales y su evolución, constituye el tiempo atmosférico y las condiciones medias durante un largo período, se conoce como clima de un lugar o una región.

La climatología es la ciencia que estudia el clima y sus variaciones a lo largo del tiempo. Aunque utiliza los mismos parámetros que la meteorología, su objetivo es distinto, ya que no pretende hacer previsiones inmediatas, sino estudiar las características climáticas a largo plazo.

La meteorología es una ciencia auxiliar de la climatología ya que los datos atmosféricos obtenidos en múltiples estaciones meteorológicas durante largo tiempo se usan para definir el clima y predecir el tiempo. Este conocimiento ha sido siempre de suma importancia para el desarrollo de la agricultura, la navegación, las operaciones militares y la vida en general.